El sector lleva mucho tiempo avisando. Las diferentes asociaciones que aglutinan a los operadores de transporte terrestre, así como las patronales llevan un lustro advirtiendo del que será el gran desafío. La falta de conductores profesionales, capacitados para dar salida a toda la mercancía que mueve la cadena de suministro por carretera es demasiado evidente, y aunque por el momento son menores, en la Comunidad Valenciana ya se registran paradas operativas por falta de transportistas terrestres.
En el blog de Iberoforwarders hemos hablado en varias ocasiones de cómo dicha falta de conductores va a incidir en la competitividad del sector. Y no solo en eso, sino que puede desencadenar atascos en la cadena de suministro, subidas de costes por búsquedas de transporte alternativo, o problemas de parada en fábricas que dependan de materia prima que utiliza esta vía de transporte. No es un baladí, y es una buena parte de la economía la que está en juego y exige una solución muy urgente a dicha falta de transportistas terrestres que ya está causando las primeras paradas.
Una demanda al alza y cada vez hay más falta de transportistas terrestres
Para la Federación Valenciana de Empresarios del Transporte y la Logística (FVET) la falta de 2000 conductores en la región ya supone paradas operativas. De hecho, según los cálculos de la asociación, ya son un 52% de empresas las que se encuentran con problemas a la hora de encontrar conductores profesionales para sus mercancías.
Las razones que están detrás de la falta de conductores profesionales son fundamentalmente la edad de las plantillas, así como la falta de capacitación de los jóvenes. De hecho, los datos estadísticos muestran que entre las nuevas generaciones, apenas el 0,3% de los que actualmente tienen menos de 25 años cuenta con el permiso de conducción C+E.
Unir oferta de trabajo con potenciales trabajadores jóvenes
El reto parece fácil, pero en la práctica no resulta tanto. En la actualidad, la Comunidad Valenciana tiene 51.600 jóvenes desempleados. Por lo tanto, ofrecerles oportunidades en un sector que necesita rejuvenecer sus plantillas, y que sobre todo requiere personal de manera inmediata puede ser la solución a ambos problemas. Sin embargo, el coste, de unos 3500€ es una barrera para obtener los permisos de conducción y el certificado de aptitud profesional.
Desde la Comunidad Valenciana se apuesta por una formación reglada que dé conocimientos a los futuros profesionales, y por ello está disponible el FP Medio de Técnico en Conducción de Vehículos de Transporte por Carretera. Solamente esta Comunidad y Cataluña lo tienen en su oferta formativa. Y esto podría ser una ventaja, ya que su duración de dos años puede ofrecer a las empresas profesionales formados en los próximos períodos.
Respecto al coste, todavía no se ofrecen bonificaciones como las que sin embargo sí se han implantando en otras comunidades. Así, Madrid se ha unido recientemente a ayudas que ya ofrecían en Castilla y León, Galicia, La Rioja, Cantabria o el País Vasco que permiten sufragar parte de los costes del carnet y certificado.
Las asociaciones de la Comunidad Valenciana esperan que pronto la formación empiece a incorporar a nuevos profesionales como conductores profesionales para ir reduciendo paulatinamente los problemas con las paradas debidas a la falta de personal. Aunque tampoco descartan seguir presionando a la Generalitat Valenciana para que complemente esa formación de FP con ayudas que reduzcan el coste de obtener los carnets y el certificado.